La Sal Virgen natural tradicional de la salina San Vicente en la localidad gaditana de San Fernando es lavada en origen con el método romano que garantiza la presencia de micro y oligoelementos como el yodo, el magnesio el calcio o el hierro. La sal es menos salada que las sales lavadas industrialmente que sólo aportan cloruro sódico a la dieta y ningún elemento esencial.
En 2011 se reconoce en nuestro país a la sal española más antigua y tradicional, con menor contenido en cloruro sódico y mayor en micro y oligoelementos naturales (Mg, K, I, Ca, etc).
Se produce exclusivamente en las salinas tradicionales con artes no industriales. Esta sal marina, contribuye con enormes beneficios ambientales a los espacios naturales donde se produce. En el nuevo reglamento (RTS 1634 de nov) y gracias a su calidad, se le ha otorgado el mismo apellido que a nuestro aceite de oliva, Virgen.
Se definen así dos tipos:
Sal Marina Virgen: Es la sal procedente de la evaporación natural del agua del mar, lavada solo con el mismo agua que la produce.
Flor de Sal: la capa flotante de sal cristalizada en la superficie de los cristalizadores. Ambas deben ser obtenidas exclusivamente por la acción del sol y del viento, recogidas a mano sin la adición de ningún ingrediente artificial. Son sales menos saladas, más sabrosas y más saludables que las sales de mina (incluida la del Himalaya) o que las marinas industriales. Son solo comparables a la sal gris francesa o a la sal tal cual portuguesa.
En Salina San Vicente además han logrado certificarlas como ecológicas. Siendo así la primera colección de Sal Virgen que logra este magnífico reconocimiento.
- Origen : España
- Certificados : Agricultura ecológica de la UE